FUSTIGARTE O MIMARTE
Os prometo que hoy me ha costado la vida despertarme.
Anoche me acosté diciendo “mañana me levanto a las 06:00h, escribo, medito, me preparo un buen desayuno y así cuando todos se despierten, yo ya estoy lista”.
JA! ha sonado el despertador y lo he parado como 4 veces. Y aquí estoy, las 07:30h sin haber escrito nada y con un café intenso intentando abrir los ojos para dar comienzo al día.
Lo cierto es que, me cuesta porque termino muy cansada del día, pero os prometo que me fui a dormir temprano y acabé cerrando ojos a las 00:00h, eso sí, con un libro en mano y con una luz tenue. Intentando respetar los ritmos circadianos jeje.
La verdad es que desde que aplico los consejos de mi compi Raquel Linares, Doctora en Inmunología digestiva con PNIE, me encuentro mucho mejor.
Si algo me he propuesto para este 2025 es bajar el ritmo, algo que a muchas nos cuesta y que no nos damos cuenta de lo importante que es. ¡ojo! bajar el ritmo no significa trabajar menos. Significa tomarse las cosas con más calma y no ir acelerada, significa ir paso a paso y relativizando. Significa tomarse espacios de conexión y calma para mantener el equilibrio. E ir avanzando poco a poco pero sin pausa.
Esto es algo que estoy viendo mucho con la gente que trabajo. Todas queremos bajar el ritmo, pero ninguna lo hacemos. Y es tan tan necesario el buscar esos huecos de distribución de tareas, de actividad dinámica para el cuerpo, de meditación para la respiración, de respetar los ritmos circadianos para que tu cuerpo y mente funcionen como deben, de mantener una alimentación adecuada y saludable aunque a veces pequemos y no pasa nada…
Y diréis, Buah! qué presión y estrés intentar mantener todo eso. Pero yo creo y os digo con sinceridad, que una vez incorporas esos hábitos a tu vida y los mantienes igual que te duchas, te lavas los dientes o pones una lavadora… al final no cuesta tanto.
Comer saludable debería ser un vicio para todo el mundo. Y comerte un chocolate, tomar un vino y zamparte una bolsa de patatas algún día, es placer. Pero con moderación.
Mantener un equilibrio entre el trabajo y la vida personal, debería ser una obligación. Porque tener tiempo de calidad para ti y los tuyos es con lo que te quedarás el día de mañana. Como siempre digo, el tiempo tiene caducidad y es oro.
Bajar el estrés y el ritmo tendría que ser una norma establecida en nuestra mente. Que cada vez que tuviésemos en exceso, sonase una alarma roja con sonido chirriante para hacernos ver que estamos en peligro.
Trabajar los hábitos es positivo y necesario. Una vez los estableces y te comprometes contigo misma a crear algo bonito para tu día a día, verás que es lo mejor que has hecho para tu vida. Sucederán cosas y tendrás que resolverlas, pero seguro que ya te enfrentas a ellas de diferente manera. Y como yo, hoy por la mañana que en lugar de a las 06:00 me he levantado a las 07:00h, no es necesario ni fustigarse ni castigarse, simplemente observar que hoy no era el día y no pasa nada.
Seguimos trabajando en crear una vida más estable y mejor.
¿Y tú? ¿QUÉ OPINÁIS DE TODO ESTO?
Si aún no te has planteado el comenzar a trabajarte, puedes hacerlo ya. Pincha aquí abajo si quieres una mejor versión de ti misma ;)
SI QUIERES EMPEZAR POR ALGO, EMPIEZA POR TI
Os abrazo fuerte.